La Fiscalía del estado de Sonora informó que las primeras investigaciones, tras el asesinato de Marco, el novio que fue baleado en su boda, afuera de la iglesia en Sonora, revelaron que el ataque iba dirigido a otra persona quien el mismo día contrajo nupcias en otra ciudad.
La dependencia detalló que no se descarta ninguna línea de investigación y “se realizan todos los peritajes de Crimínalistica y Balística de Campo necesarios, a fin de esclarecer plenamente los hechos y dar con los responsables para hacer justicia”.
Marco Antonio tenía 32 años, era originario de Durango, era ingeniero en Sistemas Computacionales y trabajaba en una empresa del estado de Jalisco.
El novio había esperado con ilusión la noche del 22 de octubre. Se casaría con la mujer de su vida en Caborca, Sonora.
Había llegado a esta ciudad esa misma mañana junto con sus padres y su hermana a celebrar el enlace nupcial con una joven oriunda de esta localidad.
Todo era felicidad, hasta que al salir de la iglesia de “Nuestra Señora de la Candelaria”, sujetos armados se le acercaron y le dispararon ante presencia de invitados y la novia.
El llanto surgió. Las ambulancias llegaron, además de Marco, su hermana resulto con una herida de bala en la espalda. Minutos después, cuando Marco iba rumbo al hospital murió. Ella se reporta fuera de peligro.
La Fiscalía de Sonora reveló que hasta el momento ha realizado entrevistas a testigos y sigue tras la pista de los delincuentes.
La tarde del domingo el gobernador del Estado, Alfonso Durazo, se había pronunciado sobre este caso y comentó: “No hay mayor motivo para un ánimo de psicosis, hay que tener los cuidados normales que se tiene en cualquier otra ciudad, las primeras líneas de investigación apuntan a que fue un ataque dirigido específicamente contra la persona que lamentablemente perdió la vida”.
Aquí la versión oficial de la Fiscalía :