A unos días de la desgracia en la cual un menor de edad dispara a otro por la frustración de perder en las maquinitas, la víctima fue sepultada en medio del dolor y reclamo de la familia del deudo.
El lamentable hecho se suscitó mientras ambos pequeños jugaban en una tiendita de la esquina, cuando uno de los menores de 10 años perdió el juego y acudió a su domicilio en busca busca de un arma de fuego y regresó para dispararle.
La familia de Samuel N exige justicia, tanto para el menor que accionó el arma, así como com para si padre, quien era dueño del instrumento mortal. Mientras esto sucede la Fiscalía General de Justicia de Veracruz realiza las investigaciones pertinentes.