Paola Schietekat, es mexicana y residente en Qatar desde 2019, vivía su sueño mientras trabajaba en el Comité Organizador del Mundial de Futbol en Qatar, cuando fue abusada sexualmente, pero en lugar de castigar al agresor, ahora es Paola quien enfrenta una condena de siete años de cárcel y 100 latigazos.
Paola narra en redes sociales que la agresión ocurrió la noche del 6 de junio del 2021, cuando un amigo de procedencia colombiana se metió a su vivienda sin permiso y abusó de ella.
Ella procedió a realizar una denuncia a las autoridades acompañada por el Cónsul de México en aquel país, sin embargo el resultado de aquel proceso fue desastroso, pues no sólo las autoridades qataríes desestimaron la denuncia, sino que procedieron a abrir un proceso en contra de la propia Paola por mantener relaciones extramaritales, un crimen que se castiga duramente de acuerdo con las leyes musulmanas que rigen el país.
Schietekat denunció que, aunque su
proceso fue seguido por el Consultado mexicano al principio, la asesoría recibida resultó ineficiente e insuficiente, llegando a citar las acciones del cuerpo diplomático como ‘nulas’.
Aunque logró salir de Qatar semanas después, la sentencia de las autoridades se dictó sin que ella estuviera presente; siete años de cárcel y cien latigazos, además de una audiencia pendiente programada para el 6 de marzo.
Su agresor fue absuelto por las autoridades, pues aseguró que se trataba de la pareja de Paola; aunque no presentó pruebas, el hombre ya está libre y no padeció consecuencia alguna.
Marcelo Ebrard, titular de Relaciones Exteriores, aseguró tras una audiencia con la víctima que el Gobierno de México intercederá en el caso.
