"No quería una vida sin ella": Sacerdote y monja renuncian a sus votos por amor
"Fue simplemente tomar la decisión de emprender un camino juntos", comentó el ex sacerdote.
El amor puede ser inesperado para todas las personas incluyendo aquellos que se entregaron a la religión, y esto quedó comprobado con la historia de un sacerdote y una monja que renunciaron a sus votos por el amor que surgió entre ambos.
Mercedes Tarragona y Daniel Genovesi tenían 22 y 26 años, respectivamente, cuando se conocieron. Ambos eran devotos a la iglesia y estaban seguros de sus vocaciones hasta que comenzaron a sentir afecto el uno por el otro.
Provenientes de Argentina, la ahora pareja vivió momentos complicados pues dejaron sus cargos como sacerdote y monja luego de conocerse en la parroquia de la Provincia de Santa Fe. Ella pertenecía al grupo Hermanas Mercedarias del Niño de Jesús en Córdoba, y todo cambió cuando Mercedes se trasladó a otra región y conoció al entonces secretario del obispo.
Se conocieron cuando tenían 22 y 26 años (Foto: Vía La Nación).
A su llegada a la parroquia, le organizaron una reunión donde ambos conversaron y el interés creció a un punto de que sentimientos inesperados comenzaran a presentarse.
“No estaba preparado para encontrarme con ella. Y cuando me encontré con ella, me pasaron un montón de cosas. Yo había ingresado al seminario en cuarto año del secundario y nunca había estado de novio“, comentó al medio La Nación.
Por su parte, Mercedes sintió que eran “amigos espirituales, como Santa Ecolástica y San Benito”, asimismo, comentó que buscaban cualquier excusa para estar juntos; sin embargo, nunca se confesaron nada hasta que ella decidió renunciar del convento y trabajar en otra ciudad.
Eran sacerdote y monja, y renunciaron por amor (Foto: Vía La Nación)
Fue aquí donde las cosas comenzaron a cambiar, porque Daniel al enterarse de lo que hizo Mercedes, sintió miedo de no volverla a ver, por ello comenzó a invitarla a salir hasta que ella le confesó sus sentimientos, hecho que fue correspondido por el cura quien no quería tampoco estar sin la monja.
“Me di cuenta que no quería una vida sin ella. Entonces fue simplemente tomar la decisión de emprender un camino juntos. Y fue rápido”, comentó Daniel. Es así que él renunció a la iglesia y ambos siguieron sus emocionen y justo” cuando no podíamos más, nos dimos un beso”.
Es así que desde hace más de dos décadas, la pareja formó una vida juntos en Buenos Aires y que actualmente ya tienen dos hijas de 26 y 23 años, y no hay día que su amor no se refleje en ambos quienes decidieron ir en contra de sus creencias religiosas por una vida de mayor dicha y cariño.